Sabemos que la precaución es importante al momento de manejar. Pero existen situaciones que nos pueden distraer llevándonos a algún percance, estresándonos sin saber exactamente que realizar. En los siguientes puntos te compartimos algunas recomendaciones sobre el tema.
Respira profundo, no se pueden tomar buenas decisiones cuando se está estresado o con ansiedad. Un pensamiento que te puede ayudar es que los daños materiales tienen remedio.
Revisa que ni tú, ni tus acompañantes estén con alguna herida o dolor.
Es bueno tener la información en caso de que el vehículo se marche sin darte cuenta.
Evita realizar movimientos del auto para que permanezcan las evidencias exactas de cómo sucedieron los hechos.
Prender las luces ayudará a los demás vehículos que transitan tengan conocimiento que hubo un percance y circulen por otro carril.
Será de gran ayuda tener un tercero entre los dos intermediarios en el inconveniente que acaba de ocurrir.
Normalmente siempre hay personas alrededor que vieron como sucedió el hecho, acércate a ellos y pregúntales que fue lo que vieron sobre el suceso.
Proporciona tus datos como nombre, teléfono, dirección, etc. y solicita la información del otro conductor.
Decir la verdad siempre traerá buenos resultados, no dudes en contar cómo paso el accidente, te respaldará.
Llama a tu aseguradora y coméntale como sucedió el percance, ellos están capacitados para apoyar en casos como este.
Situaciones como recibir un golpe o emitirlo causa estrés o ansiedad y puede llegar a influir en nuestras actitudes y decisiones, es muy importante tratar de mantenernos tranquilos y así poder pensar bien cada decisión a tomar.